¿Cómo limpiar las ventanas?
Los grandes ventanales nos gustan a todos, pero al mismo tiempo son una opción arriesgada. No hay duda de que es una maravilla que la luz del Sol se cuele y esparza por el salón cambiando el ambiente de la habitación según avanza el día. La disposición de las ventanas pueden ser el alma de una casa, de su construcción, el centro sobre el que se edifica el resto de la estructura, dado que la luz lo es todo para conseguir un hogar cálido y acogedor. Sin embargo, este secreto al mismo tiempo se puede echar a perder si las ventanas resultan estar sucias y no sabemos cómo devolverles el esplendor debido. Podrás engalanar con hermosas cortinas, poner plantas de colores vivos, conseguir que la enredadera dibuje un bonito arco sobre ella,…etc. pero si las ventanas están sucias, arruinarán toda la belleza que puedas construir alrededor.
Las empresas de productos de limpieza conocen la importancia de que los cristales queden traslúcidos y lanzan en el mercado productos químicos con promesas de efectividad que devolverán el esplendor de tus ventanas. Los consumidores solemos pensar que el producto de limpieza más caro será el mejor. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Puede que el producto de limpieza químico deje un buen resultado en los cristales pero a costa de un precio alto y no con mucha diferencia respecto con un producto casero aprovechando lo que ya tenemos en casa. Mantener las ventanas limpias no resultará ser costoso ni trabajoso. Aquí van algunas sugerencias que se pueden tener en cuenta a la hora de tener unas ventanas impecables que sean el orgullo de tu casa.
SOLUCIONES CASERAS:
Hay productos de todo tipo que nos prometen fórmulas milagrosas pero, en realidad, no hay nada más efectivo que un poco de maña en casa para conseguir unas ventanas relucientes.
- PARA LIMPIEZA DIARIA:
- Combinación 1: Mezcle agua con amoniaco en una pequeña cantidad. Viértalo en un pulverizador y utilícelo para limpiar los cristales. Extienda la mezcla con un trapo o con papel de periódico en todo el cristal hasta que se seca permitiendo una limpieza eficaz y sin rastro en los cristales.
- Combinación 2: O bien mezcle 1 taza de vinagre blanco por 4 de agua y pulverícelo sobre el cristal mientras frotas con un trapo o periódico igualmente.
- PARA LIMPIEZA PROFUNDA: Simplemente agua y jabón, siendo curiosamente el lavavajillas el mejor para estos casos. Prepare dos cubos: uno con agua y jabón y otro para enjuagar. Pase agua con jabón por el cristal con un trapo o esponja escurrida para humedecer y empujar la suciedad. Tras lo cual, con un trapo seco o una espátula de agua, retire el agua con jabón. Es muy simple y efectivo.
CONSEJOS PRÁCTICOS SOBRE LAS HERRAMIENTAS
A la hora de limpiar las ventanas no cualquier utensilio es válido. Con la limpieza de las ventanas se tiene que tener, en todo caso, un sumo cuidado en lo que utilizamos para conseguir un resultado impecable y no acabar frustrados.
- Utiliza trapos de algodón o de microfibras, nada de lanas u otros materiales que puedan dejar pelusas en la superficie. Al final tendrás más trabajo por delante en lugar de avanzar rápido y de forma efectiva. O en su lugar, papel de periódico o cocina (toalla).
- Espátulas de arrastre de agua. Siguen el mismo sistema de los limpiaparabrisas pero tendrás que superar los bordes que dejan a su paso por el cristal. Requiere cierta técnica.
- Usar papel de periódico. No es el favorito de muchos, pero es completamente efectivo en la limpieza de los cristales en compañía de un producto medianamente decente. Funciona incluso mejor que las bayetas diseñadas específicamente para los cristales por grandes marcas.
CONSEJOS GENERALES:
La organización en el trabajo es esencial para un resultado efectivo. Si existiera algún manual de limpieza de cristales, sin duda debieran incluirse los siguientes puntos a tener en cuenta:
- Evite limpiar los cristales en días soleados o con mucho calor. Es mejor limpiarlos durante días nublados en que no haya ni mucha luz ni mucho calor.
- Empieza limpiando el marco antes de limpiar el cristal. Si lo hace al revés puede tener que volver a limpiar los cristales
- Cambie el agua para limpiar los cristales con frecuencia.
- Limpie primero los cristales por dentro, dado que por fuera todos los utensilios se ensucian antes y tendría que cambiarlos para continuar por dentro.
- Prepare su kit de cristalero para la limpieza mensual.
- Utilice agua fría en lugar de caliente.
LIMPIEZA DE COMPLEMENTOS
Una ventana no es solo cristal hay que tener en cuenta que los elementos que la complementan también han de estar limpios. Los toldos y las persianas suelen ser los elementos más comunes en las ventanas que requieren de una limpieza severa, por ejemplo, tras la época de lluvias.
- Toldos, una buena sacudida no les vendrá nada mal para desprender el polvo acumulado. Pero en caso de que también tengan manchas, más vale que empleemos también agua con jabón y tratemos de frotarlos. Recuerde siempre dejar el toldo abierto en caso de utilizar agua para que el sol lo seque y no se formen manchas de moho.
- Persianas, las persianas son una gran aliada para regular la entrada de luz en casa y un modo de asegurarnos un sueño profundo por más tiempo. Sin embargo su limpieza puede no resultarnos nada fácil si no estamos en una planta baja y nos tenemos que asomar al abismo. Para no jugarnos la vida limpiando la persiana es mejor abrir el tambor desde el interior y limpiar desde aquí con agua y jabón con una esponja celda por celda y aclarar con un paño húmedo.
Estos son algunos de los consejos más útiles y asequibles para conseguir unas ventanas impecables y únicas que llamen la atención de toda vecindad. Las ventanas limpias dan un aire de frescura y limpieza fundamentales en el hogar. Mantener limpias tus ventanas de forma regular ya no le supondrá tanto esfuerzo ni físico ni económico si empieza a aplicar estos pequeños trucos.